El desarrollo de nanoestructuras (nanopartículas y nanocápsulas) es una de las líneas de investigación en que más esfuerzos se invierten en el ámbito de la farmacia galénica y la tecnología farmacéutica. Estos nanosistemas posibilitan la vectorización de fármacos a las células, o tejidos diana, permitiendo así una acción más específica y dirigida de las moléculas con actividad terapéutica. El uso de moléculas con afinidad para receptores específicos de membrana sobreexpresados en células tumorales, de anticuerpos monoclonales o de proteínas, entre otros, es frecuente para obtener tal finalidad. Además, estos sistemas permiten la vehiculización de los fármacos que potencialmente pueden ser el pilar de las terapias farmacológicas de muchas enfermedades de origen genético en un futuro: las biomoléculas.